martes, 25 de octubre de 2011

Texto narrativo


TRIUNFO DE MEJILLA A MEJILLA








En 1998, una tarde de invierno en un vecindario de grandes problemas y poca suerte llamado “la cuna”; el cual era habitado por gente muy humilde y servidora pero como en todo siempre hay una parte mala y esa parte mala se llamaba “don” Aberro culion quien era: gordo, bajo, calvo, de ojos oscuros y nublados, este personaje era dueño de gran parte de las vivientes de ese territorio. Un día el gordo Sancho, que era como le decían a este personaje, fue a cobrar su renta como lo hace cada dos meses. Ya habiendo pasado por casi todos los hogares le faltaba uno, este lugar era una casita que se diferenciaba mucho de las otras, esta estaba pintada con colores muy diversos y vivos, el gordo tocó el timbre ¡Tin tun!, espero un buen rato, cuando se empezó a abrir la puerta de tan extraña casa, se asomo alguien con una sonrisa de ojo a ojo, era alto, flaco y de mirada burlona, el era Hernando Filix quien era apodado como “el mejillón”, Sancho cobró su dinero y el alegre personaje pago con un frasco de monedas de 5 y 10 pesos, esto era lo que ganaba por sus grandes payasadas todos los días en el parque del centro. Sancho, como siempre se fue sin decir una palabra, el “payaso” dio media vuelta y se adentro a su singular y colorida casa, se acostó en su pequeña cama y se quedo profundamente dormido exactamente a las dos de la tarde. Era ya de noche se despertó alas ocho y media, pero se levantó de la cama muy feliz, y el motivo de eso fue que tuvo un sueño muy de su agrado: (En el sucedió que era un payaso de circo de gran fama, estaba el en su principal acto, toda la gente lo miraba y aplaudía, mientras el hacia sus muchos y graciosos actos.

El día siguiente filix se levantó a las ocho con una extraña alegría sin saber porque fue a su pequeña cocina y miró en la alacena, solo había una porción de pan, miro en la nevera y había una botella de leche que estaba hasta la mitad, agarro su desayuno y fue a la silla del comedor, coloco su alimento cuando de pronto sintió algo muy raro, y sonó el timbre ¡Tin tun! Se paro agitado y fue corriendo haber quien era, abrió la puerta y vio un pobre joven con mala vestimenta y con aspecto sucio, lo observo fijamente a los ojos y sintió gran confianza con un extraño presentimiento de estarlo esperando durante mucho tiempo, Filix le preguntó: -¿Cómo te llamas amiguito?-. Pero el niño no contesto ni una silaba lo único que describió con una seña era que si podía entrar, Filix dijo:- entra-. El niño entro y observo todo lo que pudo hasta que se detuvo y miro fijamente un cuadro donde se mostraba a Hernando con su padre muy feliz. Filix dijo:- Siéntate donde mas te sientas cómodo amiguito-. Y entonces el niño vio la porción de pan con la leche y se sentó al lado pero sin agarrar nada, Filix se sentó al lado, partió el pan y aparto un vasito de leche y le ofreció al niño, ¡Claro! El niño todo rogado recibió sin balbucear tan deseado aperitivo para el. Cuando termino de comer Filix le puso una mano en el hombro y le pregunto el nombre, el niño lo miro y le dijo:- Pedro Filix-. Hernando se puso azul por aquella información sin decirle nada lo abrazo fuertemente y lloraron. Pedro era el hermano perdido de Hernando quien desapareció al nacer en el hospital por un incendio causado por la imprudencia de los doctores.

Eran las tres de la tarde y Hernando salió al parque como todas las tardes, pero cuando iba por el camino vio algo extraño, había una enorme carpa de color rojo y afuera de ella estaban varios personajes interesantes, estaba una mujer con una barba enorme, un joven muy alto y flaco como un alambre, un enorme hombre musculoso y otros sujetos, mirando hacia ese lugar todo embobado ¡Pram! Se estrello contra un poste y callo al suelo, se levanto y rio como todo loco fue rápido a la casa y trajo a Pedrito para que viera tal acontecimiento, entonces Filix entro y sonriendo miro a todos, fue directamente hacia el jefe del circo, lo llamo  y le dijo:-Hola mi agradado señor ¿Cómo esta? , que tal se siente hoy, mucho gusto soy el mejillón y ¿Como le dicen sus amigos a usted?-, lo miro y dijo:-Mario payaso confianzudo-, conversaron sobre las cualidades de Hernando y tuvieron sus desacuerdos, pero sin saberlo Pedrito miro a Mario  y lo saludo:-Hola jefe-, Mario lo miro curiosamente y se sorprendió:- ¡Pedrito!, mijo donde estaba, ¿Si encontró a su familia? Hernando lo miro y le dijo:- pero si mi señor si esta hablando con el mismo Hernando Filix desde hace media hora, pero Pedrito ¿Cómo conociste a Mario?-. entonces Hernando se entero  que Pedrito trabajaba en ese circo anteriormente pero un día decidió salir en busca de su familia. Hernando ya habiendo sabido todo sobre su hermanito en el circo le pregunto a Mario:- Entonces que don Mario, ¿le traigo diversión a su gran circo o no?-, Mario lo miro serio y le dijo:- ¡No ahí nada mas que hablar ustedes están muy bien recibidos en mi circo, tendrán el acto principal y viajaremos mucho así que prepárense! -, el payaso estaba tan feliz ya tendría dos cosas muy buenas que le habían cambiado la vida: la aparición de su hermanito, el sueño cumplido de un circo como hogar, partió con ellos y cumplió su meta de hacer feliz a la gente y viajo por muchos lugares conociendo a mucha gente.

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